Las Fuerzas Armadas de Rusia asestaron múltiples golpes contra varias plantas de la industria militar y un aeródromo castrense de Ucrania con misiles hipersónicos Kinzhal y otras armas, comunicó este lunes el Ministerio de Defensa ruso en un resumen de las acciones de las últimas 24 horas.
Entre los objetivos de esta nueva serie de ataques también se contaron instalaciones del sector gasístico y energético de Ucrania que abastecían a la industria militar y una planta de reparación de armas y material bélico de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Las armas de alta precisión y largo alcance fueron asistidas en su acción por vehículos aéreos no tripulados.
Los objetivos del ataque han sido alcanzados y todas las instalaciones designadas recibieron impactos, aseguraron los militares.
Las defensas antiaéreas rusas derribaron en el mismo lapso una bomba guiada de aviación, un proyectil lanzado por un lanzacohetes del sistema HIMARS, de fabricación estadounidense y también 365 drones de ala fija.
En una de las zonas de combates más intensos, cerca de la localidad de Kúpiansk, provincia de Járkov, los grupos de ataque del 6.º Ejército ruso continuaron la destrucción de una agrupación rodeada de las tropas ucranianas. El enemigo fue expulsado de sus cuatro posiciones fortificadas en la zona industrial de la orilla este del río Oskol.


